Mattiana!

Te deseó,

lo sabes,

lo ocultas,

te retraes...

Puella, puellae...

Cielo, como quisiera;

embestirte tan

impredecible y constante,

como el mar y su marea, 

así mismo abrazarte

hasta quedar hechos arena.

Viginti agnus.

Oh sí, ya puedo verlo;

Veinte años,
dos décadas,
la promesa de otra década
donde ambiciones y deseos
se materializaran, o al menos
eso suelen decirnos,
esperanzas.

Solo al llegar a los treintas
veremos al mundo como es,
no como somos.

Oh sí, envejecer.

Ya puedo verlo...

Anular.

Si tan solo quisieras,

si solo le mencionas,

haría el mismísimo

anillo de júpiter,

para ti, la sortija 

mas fina.

Etiqueta.

Para ser escritor necesitas tres cosas;

Perder razón a las palabras,

el sentido al tiempo,

y tener alguna musa.

Si te falta una, todas te fallan,

y lo peor que esto conlleva;

si te fallan todas le fallas a ella...