Meu coração.

Musa grata que se vale de mis mas entrañables anhelos,

cesa mi ahínco que el aire se vuelve denso y pausa latidos,

no pido mucho, musa adorada, ruego por una sonrisa mas no posesión

porque eres demasiado irreal para condensarte en emisaria de mis mares,

¡concédeme una sonrisa musa! que poco falta al borde,

una sonrisa sincera entre esos cristales que traslucen los mas bellos ojos.

 

Concédeme una pieza, mujer.

Você.

Del duelo quedo un sorbo de vida,

una alegría exhalante, desvergonzada,

una natural pauta al desquicio.

 

Solo queda absorber

lo mejor de lo peor

y lo mas humano

de quienes no lo son,

ganando cada porción de talento

entre velas y vino.

 

Eirōneía.

Regresé:
O bien, regreso a mi la inequívoca
melancolía de un escritor en tarde lluviosa
no sin antes haber aprendido una o dos cosas
en el fulgor de los días.
Me he encontrado con personajes sinuosos,
malaventurados, errantes, digamos en su gran mayoría,
¿Y yo? bueno yo continuo en la búsqueda de no se qué
sintiendo lo mas glamuroso de no tener tiempo para sí mismo.

Reminiscencia.

"—Cuando uno halla paz en la angulosa cadera de un bien inesperado y se sabe pertenecer, se sabe prófugo de la realidad e ingenuo de las auras mal acarreadas.—"